Habitualmente nos llenamos de actividades, descansamos poco, comemos alimentos chatarra o fast food y sin darnos cuenta, generamos enfermedades que nos afectan nuestra calidad de vida.
Vivimos en un mundo donde creemos que el consumo de suplementos vitamínicos, bebidas energizantes, pastillas mágicas, nos va a permitir realizar las actividades que nos demanda el día, sin ningún efecto negativo sobre nuestro organismo, pero la realidad es que el desgaste se produce igual y nuestro cuerpo vive con un alto nivel de estrés y con una generalizada dificultad para manejar naturalmente nuestras emociones.
Es importante que no olvidemos que para realizar de manera satisfactoria todo lo que nos demanda el día y no morir en el intento, el descanso a la noche, una alimentación balanceada y realizar actividad física de manera regular es lo que necesita nuestro cuerpo para vivir plenamente.